En una intervención durante la sesión plenaria que se desarrolla esta semana en Estrasburgo, Vallina ha avisado de que las mujeres no “somos un comodín de la sociedad, ni esperamos de forma sumisa a que nos digan a lo que tenemos que dedicarnos”, y “mucho menos” cuando esto “viene de una sociedad dominada por los grandes poderes económicos”, ha añadido.

Las mujeres, como los hombres, ha explicado la eurodiputada de IU, “tenemos el derecho a decidir sobre nuestro futuro, sobre si queremos ser empresarias o asalariadas, madres o no, casadas o solteras”. Por eso, ha sostenido que el denominado emprendimiento que promueve la UE, “es tan sólo una opción laboral como las otras” y “no la solución mágica que resuelve la conciliación familiar y la desigualdad de derechos y oportunidades”.

Al contrario, ha advertido, “la UE debe promover políticas que eliminen la desigualdad y la brecha salarial, que faciliten la conciliación familiar”, construyendo “una red de servicios públicos que ayuden a las mujeres a desarrollar su pleno potencial humano y laboral, sea lo que sea a lo que se quieran dedicar”. Lo que no se va a conseguir, ha recalcado, “a través de incentivos para que cubran sectores económicos según le interese en ese momento a la economía”. Vallina ha explicado que las mujeres son las grandes damnificadas por las políticas de austeridad implementadas por la UE y los Estados miembro y que eso se ve claramente reflejado “en la situación familiar, laboral y en las tasas de pobreza”.

Por ello, ha apelado a la Comisión Europea a que “abandone de una vez por todas la idea de que la mujer, a través de su esfuerzo, dedicación y sumisión” es “el comodín para tapar los parches de esta sociedad injusta en lo económico y en lo social”. “Emprendimiento femenino sí, ayuda para quien la quiera y todo el apoyo necesario también –ha dicho-, pero explotación de la mujer no”.