La portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, y el eurodiputado Javier Couso han calificado de “deplorable” el proceso iniciado en Brasil contra la presidenta Dilma Rousseff, que será destituida tras la votación de los miembros del Senado este jueves. Ambos eurodiputados no han dudado en calificar lo ocurrido de “golpe blando” y han mostrado su preocupación por los “tiempos oscuros que se avecinan para Latinoamérica”. Precisamente la próxima semana se desplazarán a Lisboa para participar en la reunión de la Asamblea Parlamentaria Euro – Latinoamericana (Eurolat).

“La votación en el Senado brasileño este jueves ha confirmado el golpe blando que ha sufrido Rousseff. No se puede calificar de otra manera cuando la oposición, que perdió claramente en las urnas hace menos de dos años, ha decidido secuestrar el país gracias a una serie de mecanismos parlamentarios”, ha denunciado Albiol. “Lo dijimos la semana pasada y lo volvemos a repetir. En Brasil hemos vivido un golpe blando, donde una élite económica apoyada en una oposición irresponsable ha arrebatado su voto a más de 54 millones de brasileños”, ha advertido Couso, que ha lamentado que la UE esté “más preocupada de seguir fomentando una agenda desestabilizadora en Venezuela” que de “posicionarse firmemente del lado de la presidenta Rousseff”.

Ambos eurodiputados, miembros de Eurolat, han advertido que “el acoso y derribo que sufre Venezuela, la llegada de Macri al poder en Argentina y ahora la destitución de Rousseff en Brasil” son la muestra mas palpable de que “se avecinan tiempos oscuros en el continente latinoamericano”. “La UE debe posicionarse. No puede continuar poniéndose de perfil ante este tipo de asaltos a la democracia como ya hiciera con el golpe de Estado contra Zelaya”, han afirmado.