La crisis golpea dramáticamente a la sociedad vasca, tras cuatro años desde su inicio el paro no ha parado de crecer, situándose la tasa por encima del 16%, 164.700 parados y paradas. La económica ha entrado en recesión, con crecimientos negativos del PIB y cierres constantes de empresas.

Los recortes en sanidad, educación y servicios sociales se han ido sucediendo a lo largo de estos años, empeorando su calidad y disminuyendo sus prestaciones.

El trasvase de riqueza de la clase trabajadora al capital ha sido constante, abriendo la brecha entre los que más tienen y los que menos tienen. Por ello, la pobreza ha crecido hasta afectar a más del 11% de la sociedad vasca que vive por debajo del umbral de la pobreza.

Tanto la Troika como los Gobiernos de Rajoy y Urkullu siguen empeñados en aplicar políticas de recortes que se han demostrado incapaces de generar empleo y bienestar para la ciudadanía.

El ataque del neoliberalismo, por tanto, es brutal y bien diseñado, persigue acabar con el Estado del Bienestar, privatizando los servicios públicos y deteriorando las condiciones laborales y sociales de la inmensa mayoría social.

Ante esta dura situación, es absolutamente urgente construir espacios de unidad sindical, social y política que se enfrente con fuerza al ataque tan brutal que estamos sufriendo. No valen excusas, hay que ponerse de acuerdo en lo esencial y actuar unidos.

Para Ezker Anitza-IU, la huelga general es el último y más poderoso instrumento para hacer frente a las patronales y a los gobiernos neoliberales. Sólo las huelgas generales convocadas en Euskadi de forma unitaria, han demostrado su potencial movilizador y el éxito de participación de la clase trabajadora y del conjunto de la sociedad afectada por la crisis.

La unidad de los trabajadores y de las trabajadoras para combatir al capitalismo vasco, español y europeo, es fundamental, pero esta unidad debe tejerse desde la cercanía, desde los centros de trabajo, en las luchas por los convenios colectivos y por las mejoras laborales.

Por eso, lamentamos profundamente esta nueva ocasión perdida para organizar y celebrar una huelga general unitaria que plantee objetivos comunes, medibles y alcanzables, que una a la clase trabajadora vasca por encima de identidades y también de fronteras, que se enfrente con fuerza a los gobiernos, a las patronales y al capital europeo.

Por último, desde Ezker Anitza-IU saludamos las múltiples experiencias unitarias que se están dando en los centros de trabajo, en las luchas sectoriales o en la reciente iniciativa movilizadora promovida por los Comités de empresa en lucha y animamos a seguir por este camino.

Presidencia de Ezker Anitza-IU

Bilbao, 20 de mayo de 2013