Las mujeres vemos atacadas nuestra libertad e independencia, nuestra autonomía, nuestros derechos sexuales y reproductivos, nuestro derecho a decidir, nuestro derecho a la salud.

La última es que el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad en su nueva política de estadísticas referentes a la violencia de género no va a contabilizar a las heridas, a las muertas parece que no va a tener otro remedio, que pasen menos de 24 h en el Hospital.

Si bien es cierto que las estadísticas no tienen la capacidad de recoger todos los aspectos estructurales de esta lacra no dejan de ser un instrumento útil para visibilizar la violencia machista.

Ya solo en el 2012 de 128.500 denuncias, tan solo un 11% tenía parte de lesiones.

La semana pasada se anunciaba otra decisión contra los derechos de la mujeres la intención de dejar sin cobertura en los tratamientos de reproducción asistida a las mujeres lesbianas o mujeres solas, es decir mujeres que no tengan a su lado un varón. La cartera común básica de servicios que está definiendo el Ministerio de Sanidad los reserva solo para "parejas integradas por un hombre y una mujer"

Ezker Anitza denuncia la ideológica fascista y religiosa  que pretende situar a la mujer en el hogar  como esposas y madres dependientes de los hombres.