El parlamentario de Ezker Anitza-IU y portavoz adjunto de Elkarrekin Podemos, Jon Hernández, considera que “Inspección de Trabajo necesita más medios” para ejercer su labor, por lo que ha preguntado en Comisión a la Consejera de Trabajo y Justicia del Gobierno Vasco, María Jesús San José, si considera “suficientes” los recursos y el personal con el que cuenta. Además, ha preguntado a San José por el presupuesto que va a contar su departamento. Hernández ha pedido que se controlen las horas extras, ya que “suponen solo el 2% de lo que investiga este órgano, y a la vez, supone el 23% de las sanciones que impone”.

El parlamentario de Ezker Anitza-IU considera que “si se investigase más, afloraría más fraude, un fraude que afecta también a la Seguridad Social, ya que la mayoría de horas extras, además de ilegales, no se remuneran”. Hernández afirma que “se han aprovechado las reformas laborales para “profundizar en un modelo que ha minimizado derechos y que se caracteriza por más precariedad, más temporalidad y más siniestralidad laboral”.

Considera fundamental la labor de Osalan y de la Inspección de Trabajo, por lo que pide al Gobierno que realice un esfuerzo “en cuanto a los medios y necesidades que puedan necesitar para cumplir con su cometido”. “Nos preocupa la falta de capacidad de la Inspección de Trabajo para llegar donde tiene que llegar” afirma Hernández, “nuestra propia experiencia como trabajadores y activistas sindicales nos dice que más allá de los datos concretos que maneja el departamento, la realidad es que la inspección de trabajo es un organismo manifiestamente mejorable”. “No tenemos dudas sobre la formación y profesionalidad del personal, por lo que entendemos que se trata de una falta de medios”, ha subrayado.

El parlamentario de Ezker Anitza-IU considera que hay que “poner el foco de manera urgente” en la subcontratación, mejorar los protocolos y procedimientos de coordinación en materia de prevención de riesgos entre las empresas principales y las subcontratadas y una actuación “específica” de forma conjunta entre Inspección de Trabajo y Osalan, para “garantizar que haya auténticas medidas de coordinación preventiva entre las empresas principales y las subcontratadas”, así como prestar especial atención en las enfermedades profesionales.